Tisza von Borosjenô, Kálmán o Colomán (1830-1902)
Estadista y político húngaro nacido en Geszt (comitado de Bihar) el 16 de diciembre de 1830 y fallecido en Budapest el 23 de marzo de 1902; ejerció el cargo de primer ministro de la monarquía dual austro-húngara y fue padre de István, Conde de Tisza, también primer ministro de dicho Estado (véase Imperio Austro-húngaro).
Nacido en el seno de una familia perteneciente a la alta nobleza húngara, estudió Derecho. En 1848 accedió al Ministerio de Instrucción Pública, donde comenzó a adquirir experiencia en las labores públicas. Tras el final de los episodios revolucionarios que sacudieron, en ese año, al Imperio, de los que se mantuvo a una prudente distancia a pesar de su ideología liberal, viajó al extranjero para completar su formación.
De nuevo en Hungría, fue durante un tiempo auxiliar del distrito eclesiástico de Szalonta. Tuvo una intervención destacada como orador en el movimiento de protesta de septiembre de 1859 por la denominada "Ley Thun" sobre los protestantes. En 1861 fue elegido diputado del Parlamento por las filas del Partido de Deák, liderado por Gyula Andrassy. Fue evolucionando desde posiciones radicales a moderadas, lo que le llevó a ser partidario del Augsleich ('Compromiso') con Austria conseguido en 1867.
En 1875 lideró una escisión del partido de Deák, llamado después Partido Liberal, que se hizo con el gobierno húngaro y, en calidad de tal, fue llamado a Viena para ocupar la cartera de Interior. Poco después, las elecciones de octubre de 1875 dieron la mayoría al Partido Liberal y a Tisza la presidencia del gabinete en sustitución de Andrassy, hecho que le convirtió desde entonces y hasta 1890 en dominador casi absoluto de la escena política austro-húngara. Estrechó la colaboración y fortalecimiento de las relaciones con Austria, firmó un nuevo acuerdo económico e impulsó la creación del Banco conjunto Austro-húngaro, además de establecer la enseñanza pública obligatoria y sanear la Hacienda mediante un programa de equilibrio presupuestario. Su labor en el gobierno modernizó el país mediante la construcción de carreteras, ferrocarriles y canales, el despegue industrial (aunque bastante limitado), la expansión comercial a los mercados exteriores, y la creación de una clase media nutrida con la baja nobleza y los funcionarios que contrarrestara el enorme peso social de los terratenientes. Contribuyó a dar estabilidad a la monarquía a cambio de otorgar a los húngaros un papel más relevante que al resto de las nacionalidades que la formaban; en este sentido, Tisza consiguió que Viena reconociera la potestad de Hungría para actuar libremente sobre su propio territorio, lo que se tradujo en limpiezas étnicas contra las minorías no magiares. En política exterior, llevó a cabo la ocupación de Bosnia (1878), aumentó la influencia en los Balcanes y firmó el pacto de la Triple Alianza con Alemania e Italia (1882). A finales de la década de 1880 su gobierno comenzó a ser duramente atacado por la oposición, que le acusaba de fomentar la corrupción; fue perdiendo influencia hasta que en marzo de 1890 dimitió a causa de la falta de apoyos. No obstante siguió gozando de cierta preeminencia política y desde su cargo de diputado presentó en 1898 junto a su hijo István la llamada Lex Tisza, destinada a rebajar el control parlamentario sobre el ejecutivo. Su hermano Luis, Conde Tisza de Szeged, ejerció también varios cargos ministeriales.