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HistoriaPolíticaBiografía

Nurhaci (1559-1626).

Caudillo manchú, nacido en el año 1559 y fallecido en 1626, unificó a las diversas tribus de su pueblo y fundó la futura dinastía china de los Qing, cuyos sucesores, después de su muerte, conquistaron el Imperio Ming y dieron comienzo al período manchú (1644-1912).

Como uno de los numerosos príncipes tribales del pueblo tungú o jurchida, Nurhaci fue adquiriendo preponderancia en el seno de la nación manchú, establecida al Nordeste de la Gran Muralla china, a medida que fue venciendo en el campo de batalla a todos sus rivales, tanto manchúes como mongoles, o estableciendo alianzas ventajosas mediante hábiles estratagemas, hasta que en 1583 consiguió una total hegemonía. El éxito militar de Nurhaci residió en gran medida en la eficacia de las “banderas”, creadas por él en 1601. Estas unidades, auténtica columna vertebral del futuro ejército manchú, agrupaban no sólo a los hombres de armas, sino a sus familias, sirvientes o esclavos, que se encargaban del aprovisionamiento; con ello se preservó la estructura tribal, pero añadió al mismo tiempo mayor movilidad y autonomía a sus campañas bélicas. Sucesivamente, las banderas incorporaron contingentes de tropas no manchúes, lo que permitió a Nurhaci integrar con relativa facilidad a los pueblos sojuzgados, y con ello asegurarse la lealtad de los jefes tribales.

Aunque ya en 1607 se había proclamado “kan”, en una clara muestra de sus intenciones hegemónicas sobre todas las tribus manchúes y de recoger la herencia legitimadora de los antiguos caudillos mongoles, Nurhaci dio un paso más en dicha aspiración al otorgar el nombre de Hou Chin (últimos Chin) a su clan, lo que significaba asumir también un título dinástico vinculado a los antiguos jurchidas. Paralelamente, proclamó sus derechos al “Mandato del Cielo”, manifestando así su pretensión de aspirar al trono imperial. No obstante, su estrategia política no se limitó sólo al terreno ceremonial. Fuertemente influido por el esplendor de la China Ming, Nurhaci propició el intercambio cultural con su poderoso vecino del Sur, copió su sistema de Gobierno con una administración centralizada, consciente de lo valioso que dicho instrumento era para el control del territorio, y adoptó muchas de sus normas y fórmulas protocolarias. Sus banderas se beneficiaron asimismo de la avanzada tecnología militar china, que tenía en la artillería y las tácticas de asedio su punto fuerte, e incluso, situó en altos cargos de su propio gobierno a consejeros y técnicos chinos.

Hacia 1615 Nurhaci se había erigido prácticamente en el único señor de Manchuria y había fortalecido sobremanera las estructuras del Estado Manchú creado por él mismo, Se dispuso entonces a pasar a la ofensiva contra el Imperio Ming: en 1618 atravesó la Gran Muralla y conquistó la plaza de Fushun (actual provincia de Liaoning), al año siguiente derrotó a un ejército enviado para detenerle, y en 1621 sitió y logró rendir Mukden (actual Shenyang), a donde trasladó poco tiempo después su capital (1625). La muerte le sorprendió un año más tarde cuando se disponía a avanzar sobre Corea, siendo sucedido por uno de sus hijos, Abahai (1626-1643).

Autor

  • MAH