A B C D E F G H I J K L M N O P Q R S T U V W X Y Z
LiteraturaBiografía

Cardenal, Ernesto (1925-2020)

Poeta, traductor y antólogo nicaragüense, nacido en Granada (Nicaragua) el 20 de enero de 1925 y fallecido en Managua (Nicaragua) el 1 de marzo de 2020.

Estudió en el colegio de los jesuitas de Granada y en las universidades de México y Columbia (Nueva York). En 1954 participó en una frustrada conjura contra el dictador Anastasio Somoza. Ordenado sacerdote en 1965, fue a Solentiname, un pequeño archipiélago de Nicaragua, y fundó una comunidad, refugio de poetas, místicos y opositores a la tiranía de Somoza. En 1979 fue Ministro de Cultura con el gobierno sandinista.

Su poesía está influida por la de Robert Lowell, William Carlos Williams y Thomas Merton, de quien fue discípulo entre 1957 y 1959. Cardenal cultivó temas actuales, vivos e inmediatos.

En 1960 publicó Hora O, un alegato contra las dictaduras centroamericanas; y Gethsemany, Ky, la cual destaca por su emotividad, nostalgia y claridad de expresión. En Epigramas, constituidos por composiciones originales e imitaciones de poetas latinos, en especial de Catulo, encontramos la presencia de la ironía y la frase punzante. En Salmos (1964), con el Salterio bíblico de respaldo, aparece la realidad americana como objeto de las reflexiones y las denuncias proféticas del poeta.

Su obra más internacionalmente famosa es la memorable Oración por Marilyn Monroe y otros poemas (1965), la cual tiene dos partes bien diferenciadas: en la primera, aborda el gran mito representado por la estrella americana con gran ternura y compasión; en la segunda, encontramos una reflexión sobre la impotencia del hombre ante la inesperada adversidad y la fugacidad de la vida y la degradación de la naturaleza.

Con su poesía, Cardenal se conviertió en cronista no sólo de su tiempo, sino también del pasado. El estrecho dudoso (1966), siguiendo de cerca los textos de los cronistas, constituye un conjunto de poemas dedicados a la evocación de hechos históricos.

El compromiso de Ernesto Cardenal para con su país se manifiestó también en los libros Homenaje a los indios americanos (1972), donde profundizaba en los valores morales y culturales de los nativos, y Canto Nacional (1973), en el cual la dedicación es razón íntima del alma.

La actividad creativa del poeta se extendió también a otros géneros distintos de la poesía. En Cuba es un diario de su experiencia en la isla; Vida en el amor (1970) significa una nueva concepción del hombre; en Cristianismo y revolución (1974) y en La santidad de la revolución (1976), establece una identificación entre los anhelos del pueblo y la obra del Cristianismo; y Evangelio de Solentiname (I, 1975; II, 1977) supone una interpretación del Evangelio.

Además, Cardenal contribuyó a la difusión de la poesía de su país con la obra antológica Nueva poesía nicaragüense (1949) y, posteriormente, con Poesía nicaragüense (1975).

Otras obras son: Mayapán (1968), Oráculo sobre Managua (1973), Viaje a Nueva York (1974), La Santidad de la Revolución (1976), Vuelos de Victoria (1984), Quetzalcóatl (1988) y Cántico cósmico (1989). En 1998 apareció en Alemania Vida perdida, el primer volumen de su autobiografia, donde hablaba de su encuentro con Dios y con la Iglesia y de su experiencia trapense. En 2002 llegó a las librerías el segundo tomo de sus memorias, Las ínsulas extrañas, donde describía su retiro en la isla de Solentiname, y dos años después el tercero y último, La revolución perdida.

En mayo de 2005 fue nominado para el Premio Nobel de Literatura, dos meses mas tarde paticipó en la inauguración de Telesur y ese mismo año fue galardonado con la Foca Mediterrania en los premios Ones.

En 2007 regresó a México, donde, entre otras cosas, participó en el XII Encuentro Hispanoamericano de Escritores Horas de Junio, celebrado el 1 de junio. En 2009 recibió el Premio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda y en abril de 2010 fue elegido miembro de la Academia Mexicana de la Lengua. Fue presidente honorífico de la Red Internacional de Escritores por la Tierra (RIET).

Autor

  • Isabel Seebold Landín